[yamapi] fall in love [Cap 1]
"forbidden love "
Nunca me había sentido tan confundido en la vida, mi vida estaba de lo más tranquila hasta que ella apareció, todo giraba en torno al trabajo y a la maravillosa vida que tenia, pero todo mi mundo giro en cuanto cruce la mirada con ella. Los pocos días que tenía tiempo libre salía con mis amigos a alguna fiesta solo para distraerme y pasármela bien con ellos, las chicas habían pasado a segundo plano para mí, pero no para mis amigos.
Un día de aquellos en los que la noche estaba mas prendida que la luna misma, salimos a un bar discreto y privado a beber algún trago fuerte entre una conversación de confianza, cuando Ryo llego con retraso no fue para nadie una sorpresa pero cuando detrás de él apareció una chica de cabellos rubios, piel blanca y tersa, dejo de ser un día normal, nos quedo mirando con timidez mientras apretaba el brazo de Ryo nerviosa, todos nos dirigimos una mirada para volver a inspeccionar a la chica, sin duda no era japonesa sus ojos eran grandes y verdes, era un poco más baja que su acompañante pero su figura era mejor que muchas de las chicas que había visto en mucho tiempo, su belleza me dejo tan anonadado que fui el único que no respondió al saludo de ambos, y solo disimule moviendo la cabeza mientras Ryo sonreía como idiota y le tomaba la mano a ella.
- valla Ryo te la tenias escondida, y como es que te has animado a traerla hoy y no nos avisado ni nada, estamos todos muy sorprendidos- Jin rompió el hielo mientras el resto de nosotros bebíamos un poco de nuestros tragos.
- No me dio tiempo no sabia que se iban a juntar hoy, Toma me ha avisado solo hace unos momentos y como estábamos en una cita no quise dejarla y la he traído para que la conozcan – Ryo jugo con sus dedos en la tersa piel de ella que de seguro era más suave que la seda misma.
- Que Ryo no les contara nada es mi culpa, yo le pedí que no dijera nada de nuestra relación por miedo a los paparazzi y las fans locas- su voz era suave y dulce, de aquellas voces que te gustaría escuchar antes de ir a dormir.
No note que mi vista solo estaba fija en ella, sus labios rojo carmesí, el inferior algo mas ancho que el superior mientras que este ultimo tenia una figura delineada y contorneada a la perfección, sus dientes blancos y aquella sonrisa perfecta me tenían hipnotizado, solo agradezco que nadie notara mi mirada perdida en ella.
- Pi despierta estas en el mundo de los sueños – Ikuta me dio una palmadita en la espalda y sonreí entupidamente, los chicos estaban hablando de cuanto tiempo llevaban y como se habían conocido, cuando escuche de la boca de Ryo que llevaban cerca de 8 meses no me lo pude creer, uno de mis mejores amigos no me había dicho nada porque una chica se lo había pedido, y peor aun la relación parecía ser mas formar y seria de lo que pensé pues la chica conocía a la familia de Ryo.
- Si lo siento estaba algo ido, con tanto trabajo pensaba que hacer mañana para tener un tiempo libre – mentí con descaro mientras tomaba mi vaso jugando con los hielos intentando mantener mi mirada en ellos.
- Deja de pensar en el trabajo hombre por dios, hay cosas mas interesantes en la vida que ello, distraeré que para ello nos hemos juntado- y tenia la razón habían cosas mucho mas interesantes, ella sentada frente a mi era sin duda algo mucho mas llamativo.
La conversación giro en torno a ellos bastante tiempo, aunque no me molesto para nada pues escucharla hablar era algo tan melodioso que me tenía completamente seducido y lo peor era que no podía dejar de mirarla o tener mi atención completamente para ella, nunca me había sentido así por una chica y me hacia verme de lo mas estupido pero en ese momento fue en lo único que no pensé, y claro esta en que tal vez alguien lo había notado.
- bueno chicos yo creo que voy a dejar a mi novia o se nos hará tarde y teníamos pensado pasar a comer un helado antes además ya saben cuento se demora uno en despedirse cuando tiene pareja – Ryo sonrío nada mas feliz y se despidió de nosotros mientras la chica hizo una pequeña reverencia con la cabeza.
Cuando se fueron no hubo ni un solo comentario de ellos como me lo habría esperado cambiaron el tema rápidamente luego de que yo preguntara que tal habían encontrado a la novia de Ryo, y me había tenido que reír de los chistes estupidos de Jin como siempre, pero esta vez me eran mas amargos, estaba completamente fuera de aquella mesa donde siempre había compartido tantas risas y momentos agradables.
Cuando llego la hora de irse tuve que ir a dejar a Jin y luego pude irme a casa pues el no se podía el cuerpo había bebido de suyo y lo mio, pero aun así no me molesto no vivía demasiado lejos de mi y así tomaba un poco de aire antes de ir a casa.
Esa chica solo era una mas entre tantas que no podía entender porque no dejaba de pensar en ella y peor aun cuando la recordaba omitía por completo el hecho de que fuera la novia de uno de mis mejores amigos, solo la recordaba a ella sonriendo y hablando mientras en ocasiones me regalaba alguna sonrisa.
Cuando estuve al fin en mi cama mirando el techo me lo repetí una y otra vez hasta quedarme dormido, no había cosa mas imperdonable que mirar la novia de tu amigo, así que si el volvía a llevarla a alguna reunión yo me iría o inventaría algo, sino solamente quitaría mis ojos de ella, la sacaría de mi cabeza como fuera, no podía hacerle algo así a Ryo. Pensé en todas las formas de dejar de pensar en ella por mi mejor amigo pero nunca llegue a pensar o a pasarme por la mente que también debía pensar en la posibilidad de que yo a ella nunca le gustara en lo mas mínimo, porque después de todo…. Yo era Yamashita Tomohisa.
A pesar de intentar no verla me fue imposible Ryo se empeño en invitarme junto con una amiga de ella a citas dobles, las amigas que Ryo invitaba eran cada vez mas lindas pero ninguna era como ella, y solo tenia los ojos cada vez mas pendientes de lo que ella hacia o dejaba de hacer, con los días comencé a conocerla, sus gustos, sus gestos, sus costumbres, era como salir con ella, pero con Ryo ocupando mi lugar, aunque no lo deseara no podía dejar de pensar en ella y no podía negarme a salir a esas extrañas citas, no por conocer chicas ni por compartir con Ryo, solo quería poder verla a ella, no importaba si no tenia tiempo o tenia trabajo que hacer posponía o iba a otras horas, pero no dejaba de salir a las citas.
No me di cuenta como el tiempo pasó y me vi sentado en una de las mesas bebiendo con mis amigos y ella estaba allí como si fuera uno más de nosotros, Ryo no había podido asistir pues se había enfermado, pero los chicos habían insistido para que ella nos acompañara. Y allí estábamos hablando solos entre tanta gente, si suena estupido pero es que para mi no el resto no existía, solo estaba ella, agradecí que esos meses nos hicieran “amigos” y pudiera hablar ya con tranquilidad con ella, cosa que no pude hacer los primeros días no era capaz de hablar sin sentir cosquilleos en el estomago o mareos al notar su mirada en mi, y es que es algo que nunca había sentido, y que para desgracia mía tanto como de otros… no dejaría de sentir.
Pensé por varios segundos como preguntarle si quería bailar conmigo pero por mas que repetí la frase en mi cabeza no fui capaz de decírsela ella en cambio muy espontáneamente me pregunto si me apetecía bailar un rato pues solo beber la emborrachaba, claramente acepte me fui con ella a la pista y en cosa de segundos estábamos bailando, note que un chico no dejaba de mirarla y me molesto me sentí como si ella fuera mi chica y me gusto, la acerque mas a mi por la cintura notando que ella se incomodaba así que agregue susurrando.
- no pienses mal, hay un tipo mirándote extraño, será mejor que note que no andas sola- en parte no estaba mintiendo pero en el fondo solo quería un pretexto para estar mas cerca de ella.
- Gracias Yamashita –susurro con su hermosa voz y siguió bailando como si nada pero sin tener malas intenciones me apegue mas a ella necesitaba sentirla solo un poco mas, no era nada malo- Yamashita, estas muy cerca
Me sonroje en notarlo sobre todo por mi mano posesiva en su cintura, pero no me aparte, me acerque lentamente casi a milímetros hasta su mejilla pegándola con la mía y me atreví a besar su oreja sin darme cuenta que ambos habíamos dejado de bailar.
- q-q-q-que estas ha-haciendo yamashita –ella se quedo paralizada debí deducir las razones pero mi cabeza jugo conmigo y pensé que si no me apartaba era porque ella no quería hacerlo y continúe empezando a morder su lóbulo lentamente mientras la pegue a mi con la mano- detente…d-d-detente
No quise escuchar, me olvide de mi mejor amigo, de la gente que estaba allí y de todo el mundo, me deje llevar notando como mi cuerpo me pedía estar con ella, el calor de los tragos anteriores habían hecho efecto y mi cuerpo no me respondía del todo, aunque si me hubiera podido responder tampoco me habría detenido.
- no quiero hacerlo – susurre cuando deje de hacerlo y me acerque a su mejilla con intención de besarla
- p-para – ella me aparto por el pecho y al fin la mire a los ojos, estaba asustada, aterrada de lo que estaba pasando y solo allí note que no me aparto por miedo no porque le gustara lo que estaba haciendo.
- Yo… lo siento no pensé que… - me sentí el peor hombre del mundo la lleve a una de las mesas y no supe que decir el silencio me apuñalaba a cada bocanada de aire hasta que al fin las palabras salieron
- Perdóname, me deje llevar… lo siento de verdad – ella volvió su mirada a mi con una mezcla de decepción y tristeza que destrozo mi corazón y solo volvió a sonreír intentando que fuera lo mas normal posible.
- No pasa nada, debio ser por el alcohol, pero por favor no vuelvas a hacerlo, eres mi amigo y no quiero tener que decirte algo feo, Nishikido es mi novio y tu como su amigo aun con mayores razones no deberías hacer cosas como esa.
Allí termino la conversación ella tenia razón era lo peor y así me sentía pedí algunos tragos mas y no fui consiente de lo que ellos hicieron en mi hasta que al levantarme de la mesa para irme el suelo se movió bajo mis pies y perdí el equilibro por unos segundos de no ser por Tegoshi que me atrapo por el brazo habría terminado en el suelo, no era capaz de conducir y le pedí a el, pues sabia que no bebe que me dejara en mi casa pero que primero dejara a la chica en la suya, estábamos por irnos cuando Jin se acerco y ofreció el ir a dejarla pues comento que mi estado era deplorable y lo mejor era que me recostaran lo antes posible, en ese momento no dude de el era mi amigo pero ahora que lo medito, debí hacerlo, si yo el mejor amigo de Nishikido había dudado y había pasado por sobre el al intentar algo con su novia ¿Por qué Jin no lo haría? Pero en ese momento con lo poco sobrio que estaba no me detuve a pensar y solo agradecí el llegar pronto a casa.
A la mañana siguiente me despertó el teléfono celular en lo que creí en primer instancia seria la alarma pero luego de tomarlo y leer el los kanjis de Ryo me senté en la cama asustado y respondí casi sin voz, despertando de golpe en escuchar los sollozos de una chica me levante de la cama, era ella, no era capaz de hablar de pronunciar palabra alguna pero en escuchar de fondo las voces de Jin y Ryo sulfuradas en una discusión solo le pregunte donde se encontraba y a medio vestir salí de casa en dirección a la cada de Jin que por suerte estaba cerca, el sol me molestaba y me dolía la cabeza, termine de vestirme en el auto y en llegar aparque el auto junto al de Ryo entre a zancadas notando que la puerta estaba abierta la cerré tras de mi y allí estaban golpeándose uno al otro como si en ello estuviera la vida, como pude les aparte recibiendo uno que otro golpe por entrometerme.
- -¡¡BASTA!! ¡¡¿¿Qué demonios esta pasando aquí??!!- vi en una de las esquinas a la pobre abrazada al teléfono cubierta por la chaqueta de Ryo con las piernas descubiertas y palidecí al punto de que casi caigo yo por el empujón de Jin al querer volver a golpear, me sostuve como pude y mire a Ryo sin poder creérmelo, estaba rojo de impotencia con la vena del cuello mas que delineada mientras lanzaba fuego por los ojos, se soltó de mi y se acerco a ella abrazándola- ¿q-q-que demonios has hecho Jin?
- yo estaba borracho, no a sido con ninguna intención, ni siquiera recuerdo del todo lo que ha pasado –Jin no parecía del todo arrepentido y de hecho en su voz se notaba un timbre burlesco que me hirvió la sangre al punto de querer propiciarle yo también una paliza pero me controle.
- no tiene justificación… dime que no le has hecho nada… - le mire rogando que fuera así, que solo hubiera intentado algo y ella se negara pero no había forma de que su semidesnudez calzara en esa cuartada.
- que acaso estas ciego – susurro Ryo detrás de mi y ayudo a su novia a levantarse.
- hijo de...- no dije nada y le di al espalda a Jin, mientras iba a buscar la ropa de la chica encontrarla repartida en la habitación me hizo estremecerme, volví y ella entro al baño para cambiarse ayudada por Ryo mientras Jin se sujetaba la cabeza sentado en el sillón sin saber si lo hacia por fingir culpabilidad o porque realmente se tenia una basura.
- yo no recuerdo nada pi créeme – no podía hacerlo sentía tanta o mas ira que Nishikido pero intentaba controlarla por no dar sospechas a mi amigo, ignore a Jin y ayude a Ryo a salir de allí, cuando la vi subida en el auto con la mirada perdida me pregunte, ¿si yo hubiera tenido la oportunidad habría hecho lo mismo que Jin? Pero para mi pesar… no fui capaz de responderme porque temía de mi propia respuesta.
No deje de estar preocupado ni un solo segundo y acompañe a Ryo al hospital a que a chequearan y ambos nos aliviamos de saber que aunque su novia no fue capaz de decírselo por vergüenza no hubo penetración alguna, al parecer la chica pudo escapar y se había escondido en el baño hasta que Jin se durmió y pudo salir para llamar a Ryo, luego de estar mas tranquilos ambos fuimos a ver un café mientras ella dormía.
- no puedo creer que uno de mis mejores amigos me hiciera algo así – susurro Ryo recobrando el habla luego de horas.
- Ni siquiera yo puedo creérmelo aun, nunca me esperaría algo así de un amigo –mi voz fue acallándose lentamente en notar el peso de lo que estaba diciendo.
- Ahora en quien voy a confiar, ni siquiera puedo confiar en que mis amigos cuidaran y respetaran a mi novia, ¿que acaso no se dan cuenta de que de verdad me gusta? ¿Cuándo antes había durado tato tiempo con la misma persona?- escuchar a Ryo me obliga a bajar la mirada a mi taza de café, el tenia mucha razón, el jamás había presentado a sus novias, pues nunca ninguna le duraba mas de 1 mes, pero esta ves era diferente ya llevaba con ella 11 meses, en nada cumplirían un año y yo no podía sacarla de mi cabeza desde que la conocí, pero el escucharlo me removió la conciencia.
- Yo… siento haber dejado que Jin se la llevara ayer pensé que estaría segura con el además yo no me sentía nada de bien- intente justificarme aunque no sabia si corría mas peligro a mi lado.
- No es tu culpa pi, no sabias que Jin haría algo así, de verdad me gusta y mucho, tanto como para pensar en perder a uno de mis mejores amigos por ella – Jin era sin duda nuestro mejor amigo, ambos nos miramos intentando buscar algo para defenderle pero lo que había hecho no tenia ni justificación ni quien le defendiera.
- Aléjate de el un tiempo ve con los días lo que pasa en tu corazón, se que Jin no tiene perdón alguno, pero el alcohol tiene mucho que ver en esto y agradezcamos que no paso a mayores, no le justifico pero piensa todo con calma ahora tienes la cabeza caliente, deja que tus pensamientos se refresquen.
No supe que más decirle y es que ni yo mismo me creía mis palabras, no podría perdonarle por tocarla, si yo no podía Ryo mucho menos lo haría, pero fue lo único que se me ocurrió, los días pasaron y ella volvió a sonreír aunque Ryo me confeso que estaba menos cariñosa que antes y que en ocasiones lo rechazaba, comencé a ser el consejero de Ryo y eso me ayudaba porque escucharle hablar de cuanto la quería hacia que mis deseos por ella bajaran, porque mi amistad era mas importante, pero cuando la miraba a los ojos el cariño que sentía por ella crecía en inmensidad, tanto que empezaba a temer que lo que sintiera por ella fuera tan intenso como lo que el mismo Ryo sentía.
Los días pasaron Ryo y Jin no volvieron a cruzar palabra y tenía que turnarme por días para verlos aunque a Jin intentaba evitarlo en lo posible, había hablado con el de lo ocurrido y había preferido dejar en que le creía que no recordaba lo que hizo, culpando en todo momento al alcohol. Salir con Ryo significaba hacer el imbesil entre la hermosa pareja, cada vez era mas molesto y empeze a escoger salir a dar un paseo con tego o algún otro miembro de la compañía
"forbidden love "
Nunca me había sentido tan confundido en la vida, mi vida estaba de lo más tranquila hasta que ella apareció, todo giraba en torno al trabajo y a la maravillosa vida que tenia, pero todo mi mundo giro en cuanto cruce la mirada con ella. Los pocos días que tenía tiempo libre salía con mis amigos a alguna fiesta solo para distraerme y pasármela bien con ellos, las chicas habían pasado a segundo plano para mí, pero no para mis amigos.
Un día de aquellos en los que la noche estaba mas prendida que la luna misma, salimos a un bar discreto y privado a beber algún trago fuerte entre una conversación de confianza, cuando Ryo llego con retraso no fue para nadie una sorpresa pero cuando detrás de él apareció una chica de cabellos rubios, piel blanca y tersa, dejo de ser un día normal, nos quedo mirando con timidez mientras apretaba el brazo de Ryo nerviosa, todos nos dirigimos una mirada para volver a inspeccionar a la chica, sin duda no era japonesa sus ojos eran grandes y verdes, era un poco más baja que su acompañante pero su figura era mejor que muchas de las chicas que había visto en mucho tiempo, su belleza me dejo tan anonadado que fui el único que no respondió al saludo de ambos, y solo disimule moviendo la cabeza mientras Ryo sonreía como idiota y le tomaba la mano a ella.
- valla Ryo te la tenias escondida, y como es que te has animado a traerla hoy y no nos avisado ni nada, estamos todos muy sorprendidos- Jin rompió el hielo mientras el resto de nosotros bebíamos un poco de nuestros tragos.
- No me dio tiempo no sabia que se iban a juntar hoy, Toma me ha avisado solo hace unos momentos y como estábamos en una cita no quise dejarla y la he traído para que la conozcan – Ryo jugo con sus dedos en la tersa piel de ella que de seguro era más suave que la seda misma.
- Que Ryo no les contara nada es mi culpa, yo le pedí que no dijera nada de nuestra relación por miedo a los paparazzi y las fans locas- su voz era suave y dulce, de aquellas voces que te gustaría escuchar antes de ir a dormir.
No note que mi vista solo estaba fija en ella, sus labios rojo carmesí, el inferior algo mas ancho que el superior mientras que este ultimo tenia una figura delineada y contorneada a la perfección, sus dientes blancos y aquella sonrisa perfecta me tenían hipnotizado, solo agradezco que nadie notara mi mirada perdida en ella.
- Pi despierta estas en el mundo de los sueños – Ikuta me dio una palmadita en la espalda y sonreí entupidamente, los chicos estaban hablando de cuanto tiempo llevaban y como se habían conocido, cuando escuche de la boca de Ryo que llevaban cerca de 8 meses no me lo pude creer, uno de mis mejores amigos no me había dicho nada porque una chica se lo había pedido, y peor aun la relación parecía ser mas formar y seria de lo que pensé pues la chica conocía a la familia de Ryo.
- Si lo siento estaba algo ido, con tanto trabajo pensaba que hacer mañana para tener un tiempo libre – mentí con descaro mientras tomaba mi vaso jugando con los hielos intentando mantener mi mirada en ellos.
- Deja de pensar en el trabajo hombre por dios, hay cosas mas interesantes en la vida que ello, distraeré que para ello nos hemos juntado- y tenia la razón habían cosas mucho mas interesantes, ella sentada frente a mi era sin duda algo mucho mas llamativo.
La conversación giro en torno a ellos bastante tiempo, aunque no me molesto para nada pues escucharla hablar era algo tan melodioso que me tenía completamente seducido y lo peor era que no podía dejar de mirarla o tener mi atención completamente para ella, nunca me había sentido así por una chica y me hacia verme de lo mas estupido pero en ese momento fue en lo único que no pensé, y claro esta en que tal vez alguien lo había notado.
- bueno chicos yo creo que voy a dejar a mi novia o se nos hará tarde y teníamos pensado pasar a comer un helado antes además ya saben cuento se demora uno en despedirse cuando tiene pareja – Ryo sonrío nada mas feliz y se despidió de nosotros mientras la chica hizo una pequeña reverencia con la cabeza.
Cuando se fueron no hubo ni un solo comentario de ellos como me lo habría esperado cambiaron el tema rápidamente luego de que yo preguntara que tal habían encontrado a la novia de Ryo, y me había tenido que reír de los chistes estupidos de Jin como siempre, pero esta vez me eran mas amargos, estaba completamente fuera de aquella mesa donde siempre había compartido tantas risas y momentos agradables.
Cuando llego la hora de irse tuve que ir a dejar a Jin y luego pude irme a casa pues el no se podía el cuerpo había bebido de suyo y lo mio, pero aun así no me molesto no vivía demasiado lejos de mi y así tomaba un poco de aire antes de ir a casa.
Esa chica solo era una mas entre tantas que no podía entender porque no dejaba de pensar en ella y peor aun cuando la recordaba omitía por completo el hecho de que fuera la novia de uno de mis mejores amigos, solo la recordaba a ella sonriendo y hablando mientras en ocasiones me regalaba alguna sonrisa.
Cuando estuve al fin en mi cama mirando el techo me lo repetí una y otra vez hasta quedarme dormido, no había cosa mas imperdonable que mirar la novia de tu amigo, así que si el volvía a llevarla a alguna reunión yo me iría o inventaría algo, sino solamente quitaría mis ojos de ella, la sacaría de mi cabeza como fuera, no podía hacerle algo así a Ryo. Pensé en todas las formas de dejar de pensar en ella por mi mejor amigo pero nunca llegue a pensar o a pasarme por la mente que también debía pensar en la posibilidad de que yo a ella nunca le gustara en lo mas mínimo, porque después de todo…. Yo era Yamashita Tomohisa.
A pesar de intentar no verla me fue imposible Ryo se empeño en invitarme junto con una amiga de ella a citas dobles, las amigas que Ryo invitaba eran cada vez mas lindas pero ninguna era como ella, y solo tenia los ojos cada vez mas pendientes de lo que ella hacia o dejaba de hacer, con los días comencé a conocerla, sus gustos, sus gestos, sus costumbres, era como salir con ella, pero con Ryo ocupando mi lugar, aunque no lo deseara no podía dejar de pensar en ella y no podía negarme a salir a esas extrañas citas, no por conocer chicas ni por compartir con Ryo, solo quería poder verla a ella, no importaba si no tenia tiempo o tenia trabajo que hacer posponía o iba a otras horas, pero no dejaba de salir a las citas.
No me di cuenta como el tiempo pasó y me vi sentado en una de las mesas bebiendo con mis amigos y ella estaba allí como si fuera uno más de nosotros, Ryo no había podido asistir pues se había enfermado, pero los chicos habían insistido para que ella nos acompañara. Y allí estábamos hablando solos entre tanta gente, si suena estupido pero es que para mi no el resto no existía, solo estaba ella, agradecí que esos meses nos hicieran “amigos” y pudiera hablar ya con tranquilidad con ella, cosa que no pude hacer los primeros días no era capaz de hablar sin sentir cosquilleos en el estomago o mareos al notar su mirada en mi, y es que es algo que nunca había sentido, y que para desgracia mía tanto como de otros… no dejaría de sentir.
Pensé por varios segundos como preguntarle si quería bailar conmigo pero por mas que repetí la frase en mi cabeza no fui capaz de decírsela ella en cambio muy espontáneamente me pregunto si me apetecía bailar un rato pues solo beber la emborrachaba, claramente acepte me fui con ella a la pista y en cosa de segundos estábamos bailando, note que un chico no dejaba de mirarla y me molesto me sentí como si ella fuera mi chica y me gusto, la acerque mas a mi por la cintura notando que ella se incomodaba así que agregue susurrando.
- no pienses mal, hay un tipo mirándote extraño, será mejor que note que no andas sola- en parte no estaba mintiendo pero en el fondo solo quería un pretexto para estar mas cerca de ella.
- Gracias Yamashita –susurro con su hermosa voz y siguió bailando como si nada pero sin tener malas intenciones me apegue mas a ella necesitaba sentirla solo un poco mas, no era nada malo- Yamashita, estas muy cerca
Me sonroje en notarlo sobre todo por mi mano posesiva en su cintura, pero no me aparte, me acerque lentamente casi a milímetros hasta su mejilla pegándola con la mía y me atreví a besar su oreja sin darme cuenta que ambos habíamos dejado de bailar.
- q-q-q-que estas ha-haciendo yamashita –ella se quedo paralizada debí deducir las razones pero mi cabeza jugo conmigo y pensé que si no me apartaba era porque ella no quería hacerlo y continúe empezando a morder su lóbulo lentamente mientras la pegue a mi con la mano- detente…d-d-detente
No quise escuchar, me olvide de mi mejor amigo, de la gente que estaba allí y de todo el mundo, me deje llevar notando como mi cuerpo me pedía estar con ella, el calor de los tragos anteriores habían hecho efecto y mi cuerpo no me respondía del todo, aunque si me hubiera podido responder tampoco me habría detenido.
- no quiero hacerlo – susurre cuando deje de hacerlo y me acerque a su mejilla con intención de besarla
- p-para – ella me aparto por el pecho y al fin la mire a los ojos, estaba asustada, aterrada de lo que estaba pasando y solo allí note que no me aparto por miedo no porque le gustara lo que estaba haciendo.
- Yo… lo siento no pensé que… - me sentí el peor hombre del mundo la lleve a una de las mesas y no supe que decir el silencio me apuñalaba a cada bocanada de aire hasta que al fin las palabras salieron
- Perdóname, me deje llevar… lo siento de verdad – ella volvió su mirada a mi con una mezcla de decepción y tristeza que destrozo mi corazón y solo volvió a sonreír intentando que fuera lo mas normal posible.
- No pasa nada, debio ser por el alcohol, pero por favor no vuelvas a hacerlo, eres mi amigo y no quiero tener que decirte algo feo, Nishikido es mi novio y tu como su amigo aun con mayores razones no deberías hacer cosas como esa.
Allí termino la conversación ella tenia razón era lo peor y así me sentía pedí algunos tragos mas y no fui consiente de lo que ellos hicieron en mi hasta que al levantarme de la mesa para irme el suelo se movió bajo mis pies y perdí el equilibro por unos segundos de no ser por Tegoshi que me atrapo por el brazo habría terminado en el suelo, no era capaz de conducir y le pedí a el, pues sabia que no bebe que me dejara en mi casa pero que primero dejara a la chica en la suya, estábamos por irnos cuando Jin se acerco y ofreció el ir a dejarla pues comento que mi estado era deplorable y lo mejor era que me recostaran lo antes posible, en ese momento no dude de el era mi amigo pero ahora que lo medito, debí hacerlo, si yo el mejor amigo de Nishikido había dudado y había pasado por sobre el al intentar algo con su novia ¿Por qué Jin no lo haría? Pero en ese momento con lo poco sobrio que estaba no me detuve a pensar y solo agradecí el llegar pronto a casa.
A la mañana siguiente me despertó el teléfono celular en lo que creí en primer instancia seria la alarma pero luego de tomarlo y leer el los kanjis de Ryo me senté en la cama asustado y respondí casi sin voz, despertando de golpe en escuchar los sollozos de una chica me levante de la cama, era ella, no era capaz de hablar de pronunciar palabra alguna pero en escuchar de fondo las voces de Jin y Ryo sulfuradas en una discusión solo le pregunte donde se encontraba y a medio vestir salí de casa en dirección a la cada de Jin que por suerte estaba cerca, el sol me molestaba y me dolía la cabeza, termine de vestirme en el auto y en llegar aparque el auto junto al de Ryo entre a zancadas notando que la puerta estaba abierta la cerré tras de mi y allí estaban golpeándose uno al otro como si en ello estuviera la vida, como pude les aparte recibiendo uno que otro golpe por entrometerme.
- -¡¡BASTA!! ¡¡¿¿Qué demonios esta pasando aquí??!!- vi en una de las esquinas a la pobre abrazada al teléfono cubierta por la chaqueta de Ryo con las piernas descubiertas y palidecí al punto de que casi caigo yo por el empujón de Jin al querer volver a golpear, me sostuve como pude y mire a Ryo sin poder creérmelo, estaba rojo de impotencia con la vena del cuello mas que delineada mientras lanzaba fuego por los ojos, se soltó de mi y se acerco a ella abrazándola- ¿q-q-que demonios has hecho Jin?
- yo estaba borracho, no a sido con ninguna intención, ni siquiera recuerdo del todo lo que ha pasado –Jin no parecía del todo arrepentido y de hecho en su voz se notaba un timbre burlesco que me hirvió la sangre al punto de querer propiciarle yo también una paliza pero me controle.
- no tiene justificación… dime que no le has hecho nada… - le mire rogando que fuera así, que solo hubiera intentado algo y ella se negara pero no había forma de que su semidesnudez calzara en esa cuartada.
- que acaso estas ciego – susurro Ryo detrás de mi y ayudo a su novia a levantarse.
- hijo de...- no dije nada y le di al espalda a Jin, mientras iba a buscar la ropa de la chica encontrarla repartida en la habitación me hizo estremecerme, volví y ella entro al baño para cambiarse ayudada por Ryo mientras Jin se sujetaba la cabeza sentado en el sillón sin saber si lo hacia por fingir culpabilidad o porque realmente se tenia una basura.
- yo no recuerdo nada pi créeme – no podía hacerlo sentía tanta o mas ira que Nishikido pero intentaba controlarla por no dar sospechas a mi amigo, ignore a Jin y ayude a Ryo a salir de allí, cuando la vi subida en el auto con la mirada perdida me pregunte, ¿si yo hubiera tenido la oportunidad habría hecho lo mismo que Jin? Pero para mi pesar… no fui capaz de responderme porque temía de mi propia respuesta.
No deje de estar preocupado ni un solo segundo y acompañe a Ryo al hospital a que a chequearan y ambos nos aliviamos de saber que aunque su novia no fue capaz de decírselo por vergüenza no hubo penetración alguna, al parecer la chica pudo escapar y se había escondido en el baño hasta que Jin se durmió y pudo salir para llamar a Ryo, luego de estar mas tranquilos ambos fuimos a ver un café mientras ella dormía.
- no puedo creer que uno de mis mejores amigos me hiciera algo así – susurro Ryo recobrando el habla luego de horas.
- Ni siquiera yo puedo creérmelo aun, nunca me esperaría algo así de un amigo –mi voz fue acallándose lentamente en notar el peso de lo que estaba diciendo.
- Ahora en quien voy a confiar, ni siquiera puedo confiar en que mis amigos cuidaran y respetaran a mi novia, ¿que acaso no se dan cuenta de que de verdad me gusta? ¿Cuándo antes había durado tato tiempo con la misma persona?- escuchar a Ryo me obliga a bajar la mirada a mi taza de café, el tenia mucha razón, el jamás había presentado a sus novias, pues nunca ninguna le duraba mas de 1 mes, pero esta ves era diferente ya llevaba con ella 11 meses, en nada cumplirían un año y yo no podía sacarla de mi cabeza desde que la conocí, pero el escucharlo me removió la conciencia.
- Yo… siento haber dejado que Jin se la llevara ayer pensé que estaría segura con el además yo no me sentía nada de bien- intente justificarme aunque no sabia si corría mas peligro a mi lado.
- No es tu culpa pi, no sabias que Jin haría algo así, de verdad me gusta y mucho, tanto como para pensar en perder a uno de mis mejores amigos por ella – Jin era sin duda nuestro mejor amigo, ambos nos miramos intentando buscar algo para defenderle pero lo que había hecho no tenia ni justificación ni quien le defendiera.
- Aléjate de el un tiempo ve con los días lo que pasa en tu corazón, se que Jin no tiene perdón alguno, pero el alcohol tiene mucho que ver en esto y agradezcamos que no paso a mayores, no le justifico pero piensa todo con calma ahora tienes la cabeza caliente, deja que tus pensamientos se refresquen.
No supe que más decirle y es que ni yo mismo me creía mis palabras, no podría perdonarle por tocarla, si yo no podía Ryo mucho menos lo haría, pero fue lo único que se me ocurrió, los días pasaron y ella volvió a sonreír aunque Ryo me confeso que estaba menos cariñosa que antes y que en ocasiones lo rechazaba, comencé a ser el consejero de Ryo y eso me ayudaba porque escucharle hablar de cuanto la quería hacia que mis deseos por ella bajaran, porque mi amistad era mas importante, pero cuando la miraba a los ojos el cariño que sentía por ella crecía en inmensidad, tanto que empezaba a temer que lo que sintiera por ella fuera tan intenso como lo que el mismo Ryo sentía.
Los días pasaron Ryo y Jin no volvieron a cruzar palabra y tenía que turnarme por días para verlos aunque a Jin intentaba evitarlo en lo posible, había hablado con el de lo ocurrido y había preferido dejar en que le creía que no recordaba lo que hizo, culpando en todo momento al alcohol. Salir con Ryo significaba hacer el imbesil entre la hermosa pareja, cada vez era mas molesto y empeze a escoger salir a dar un paseo con tego o algún otro miembro de la compañía