¡Espinillas al ataque!

Cap 2.- espinillas al ataque

Hermione siempre se había percatado de que los chicos no parecían preocupados de llevar una dieta equilibrada o de caer en los excesos pero para ese san Valentine, que había sido celebrado con más ánimo que otros años por la presencia de otros dos colegios, en esté cuarto año de Hogwarts, todas las alumnas estaban locas por darle a su chocolate a Víctor krum, pero no solo él se llevo muchos chocolates ese año un chico de cabellos rubios, arrogante y nada amable también había obtenido una cantidad digna de una colección, de alumnas de todas las casas y niveles, lo más curioso era que no rechazaba ninguna caja de chocolates.

Harry y ron también habían recibido muchos chocolates y no les parecía importar mucho los sentimientos de las chicas que se esforzaban por armarse de valor para entregárselos, al parecer a los hombres les importaba más competir por quien tenía más cantidad de chocolates que por saber si quiera el nombre de las chicas que se los daban.

Aunque Hermione intento ocultar las pequeñas cajas de chocolates al entrar sus amigos no las pasaron desapercibidas y se acercaron enseguida intrigados.

- Hermione ¿quién te dio chocolate? – fue ron el primero en preguntar mirando las 4 cajas
- Bueno, un chico de Ravenclaw, Neville, y George –se sonrojo al decir lo ultimo y la cara de Ron se puso aun más roja, pero no por vergüenza sino por rabia.
- ¿George? pero que yo sepa George no va por la vida regalando chocolates ¿no tendrán algo? Ten cuidado Hermi.
- no, me confesó que soy la primera chica a la que se los da –sonríe complacida pero en notar la cara de duda de Ron rueda los ojos y intento alejarse de allí, pero Ron le retuvo de la capa.
- Hermione… pero y ¿el otro chocolate de quién es?
- ah… ese lo hice yo –sonrío aunque algo triste- pero no soy capaz de entregarlo
- yo quería darte uno –lo busco entre sus bolsillos y se lo extendió- se que ya tienes pero este tiene otro significado… quiero saber si… los aceptas

Hermione se quedo paralizada solo termino de voltearse para quedar frente a él, agradeció que no hubiera más gente en la sala común esa noche y suspiro ruidosamente

- lo siento Ron, si tienen el significado que pienso no puedo aceptarlos, eres para mí un gran amigo solamente.

Ron se quedo callado, un silencio incomodo invadió la sala y ambos tuvieron que terminar mirando a otro lado por la presión del momento, Ron lucia furioso, apretaba los puños de sus manos y Hermione temió que explotara en un ataque de ira, pero lo único que hizo fue abrir su propio chocolate y comérselo desesperadamente mientras se alejaba de ella.


Hermione tomo sus cosas y se fue a la biblioteca para despejar su mente pero termino encontrando solo a Draco Malfoy, al parecer el último lugar del mundo donde la gente quería estar era en una sala llena de libros, y el chico de cabellos platinados buscaba no ser encontrado, era el momento oportuno para ella y se acerco a el chico, un tanto titubeante dejo en la mesa una caja de chocolates sin mirarle.

-Malfoy, lamento haber tomado tu… cuaderno y haberlo leído, espero aceptes ...-se quedo callada, ella sabía que lo de haber leído su cuaderno solo era la forma de disimular su interés de saber si aquella chica de la que él había hablado en su cuaderno era ella, no sabía porque había llegado a pensar en ello todos los días después de lo ocurrido y en el fondo de su corazón quería que la chica de la que él hablaba en aquellas hojas fuera de ella, porque el que alguien como Draco Malfoy quien tenía más razones para no acercarse a ella, aun así el estuviera sintiendo algo por ella era completamente admirable y demostraría que ese cariño era más puro que otros que aunque fueran completamente fáciles de cumplir nunca se atrevían a hacerlo.

- oh… valla, no esperaba algo así ¿gracias? – los tomo sin saber que más decir, no quería mal interpretar las cosas pero no podía dejar de pensar que esos chocolates representaban algo más de parte de ella- ¿y que estos chocolates son de algún chico que te los dio y no sabías que hacer con ellos?
- no, claro que no…los he hecho yo con ayuda de Ginny –no pudo mirarlo a los ojos pero la expresión de Draco era de completa sorpresa.
- ¿me quieres dar unos chocolates hechos por ti el día de san Valentine? – ella se sonrojo pero levanto la mirada y intento no dejar de ver esos ojos grises que la miraban con incredulidad porque quería que el entendiera la razón de que todo fuera como es- ¿leíste todo el cuaderno Granger?
- sí, lo hice –mintió y le miro a los ojos mientras el suspiraba y abría el chocolate a lo que sonrió.
-entonces creo que no tengo nada más que ocultarte…. Eres la última persona que quería que lo leyera, lo que siento por ti no quiere decir que te vaya a tratar bien o lleguemos a tener algo Granger…

El intentaba hacerse el duro, tenía que hacerlo, después de todo era Draco Malfoy pero a ella no le importo, el había “aceptado” lo que sentía por ella y eso era lo importante, confundida se acerco a él mirándolo a los ojos logrando que el hiciera lo mismo, se acercaron, el bajo la cabeza y ella levanto la suya pero cuando estaban así de cerca ella dejo escapar una risilla.

-¿Qué es lo gracioso? –le miro el alzando una ceja
- tienes una espinilla en la frente – sonrió burlesca y le acaricio la mejilla en notar que el comenzaba a enojarse.
- ¿Qué es eso? Una espino ¿qué?
- una espinilla, es algo que sale a tu edad en chicas y chicos, cuando por ejemplo comen demasiado chocolate –le limpio la comisura del labio donde tenía aun algo de su chocolate y él se sonrojo.
- ¿esas cosas que me salen en la cara tienen nombre? ¿Lo puedes quitar?

Hermione sonrió y fue por un libro, aunque ella sabía mucho ese tipo de hechizos no eran su especialidad, el hechizo era bastante simple así que no demoro en quitar aquel furúnculo de la frente de él.

-¿Cómo es que los magos no saben algo así? Sé que no tienen biología pero… ¿no saben nada del cuerpo humano? –Al escuchar eso Draco sonrió pícaramente a lo que ella no quiso saber la respuesta a aquello- eres un pervertido

Dejo escapar una sonrisa y Draco hizo lo mismo, pero el sonrojo de ella evidencio que los recuerdos se agruparon en su mente, no habían hablado nunca de lo que ocurrió en el baño, ni ella había preguntado sus razones para hacer todo eso, eran temas que aunque Hermione era madura no se sentía capaz de tocar. El momento de intimidad y de cercanía se esfumo cuando Pansy entro corriendo, ambos se apartaron y Draco escondió los chocolates con rapidez.

- así que este año alguien ah sentido lastima por ti y te ha regalado chocolates Granger, ¿ha sido tu padre? –Malfoy sonrió de medio lado como siempre lo hacía y se sentó abriendo las piernas en una de las sillas mientras ella lo miraba incrédula.

- Draco te estaba buscando cariño, hoy has estado muy escurridizo de seguro porque no quieres que todas esas chicas te estén molestando –Pansy sonrió y se sentó en la pierna de Draco mientras le plantaba un beso.

Hermione abrió los ojos como platos pero noto que él la apartaba, quiso pensar que lo hacía para no levantar sospechas, que le había dicho eso porque el tenia una reputación que cuidar, pero solo lo estaba justificando, tomo aire con dificultad intentando mantenerse firme.

- ¿eres una voyerista? Te gusta ver a otras parejas besarse Granger, es una lástima que tu no tengas con quien hacerlo, pero mírate, eres un ratón de biblioteca quien querría salir contigo, mira tu cabello, parece un manojo de paja… -Draco le apretó por la cintura y ella se quedo callada
- no malgastes tu tiempo Pansy, que sacas con decirle esas cosas, es Granger jamás se dará el tiempo de cambiarlas le importa más leer esos libros que tomar un poco de atención en ella misma.

Se volteo para salir de allí pero apretando su varita se escondió detrás de una de las estanterías y sonriendo con malicia susurro “finite”, y el encantamiento que tenia sobre Malfoy desapareció justo en el momento en que Pansy se acercaba a besarlo, la morena se aparto con asco mirando aquella espinilla, disimulo como pudo y se fue dejando a Draco solo.



Hermione no pudo contener la risa más, se volteo enseguida y salió de allí a zancadas, sintiendo un alivio pero en el fondo su corazón aun estaba demasiado apretado por la pena, cerró los ojos con fuerza en voltear en una de las esquinas y se apoyo en una de las estanterías que tanto conocía, cerró los ojos con fuerza notando la humedad de sus lagrimas escapar de todas formas y caer lentamente por sus mejillas, pero un tacto frio la despertó de su sueño y se vio de frente con Víctor Krum.

- las chica no deberrian llorrarr –le limpio ambas mejillas con delicadeza y le sonrió.
- Gr-gracias, no te preocupes… no es nada – ella sonrió mientras intentaba apartarse porque sus cuerpos estaban muy juntos.
- tu erres Granger ¿verrdad?
-sí, ¿Por qué lo sabes? –se sorprendió ella calmando un poco su corazón en tener algo mas en lo que ocupar su mente.
- siemprre te he mirado, erres una chica muy guapa, vengo con frrecuencia a ve-verrte – ella levanto la mirada sonrojándose al escucharlo y noto que el también lo hacía.

Sin saber como ella termino hablando con él mientras en repetidas ocasiones ella intento corregir su forma de hablar, pero termino pareciéndole muy tierna su modulación. No se percataron de cómo corría el tiempo ni como todas las miradas de los alumnos estaban puestas en ellos.

- ¿entonces utilizan móviles en vez de lechuzas? –le miro sorprendido luego de una breve explicación de que eran aquellos aparatos que ella llamaba móvil.
- pues sí, yo no tengo, pero le he pedido a mi madre que me regale uno para estas navidades, pero sí, es una forma mucho más rápida y directa de comunicarte con alguien sin importar donde este

Hermione había descubierto que le encantaba hablar de “su” mundo que era completamente diferente del mágico, pero que nunca antes nadie le había preguntado ni prestado tanta atención como Víctor, junto a él se olvido de lo que paso con Malfoy y de lo confusa que estaba por ello, se encaminaron juntos al gran comedor y todas las miradas estaban en ellos, cuando se separaron para ir a sus mesas él le beso la mano cortésmente y se alejo mientras ella intentaba disimular la vergüenza que eso había provocado en ella.

- ¿Qué hacías con Krum? –sonrió la pelirroja regalándole una sonrisa picara.
- n-nada solo hablábamos – noto que Ginny no esperaba esa respuesta- estaba en la biblioteca y él se acerco a mí, hablamos un poco y me pidió ayuda para entender algunas cosas, eso es todo

Hermione agradeció que sus amigos no estuvieran y que Ginny no le hiciera más preguntas, pero noto una mirada tan penetrante que tuvo que voltearse a buscar aquellos ojos grises que la miraban asesinamente, Draco apretaba con fuerza su copa, y a ella le produjo una satisfacción desconocida, entonces sonrió de medio lado como su enemigo lo había hecho tantas veces y se volteo para ignorarlo, entonces escucho una copa romperse y no necesito mirar para saber que Draco la había roto, estaba celoso era evidente.

- Hermione, ¿Qué te pasa? – Ginny la miro algo asustada- esa sonrisa me recuerda a Malfoy ¿Qué has hecho?
-Nada, solo eh descubierto el punto débil de alguien

Ginny no le dijo nada porque realmente ver esa expresión en Hermione le había dado miedo, y no sabía si era mejor dejar que su amiga hiciera sus planes sola, oh enterarse de que era lo que planeaba. Negó con su cabeza y solo bebió de su zumo.

Harry y Ron no tardaron en llegar a la sala común pero lo hicieron con dos cajas de chocolate y unas marcas de besos en sus mejillas, se les notaba muy feliz y Hermione sabia la razón, en notar que Cho-chan y una amiga suya entraban dirigiéndose a su mesa común, no quiso preguntar nada, parecía que todos los sentimientos que llevaron a Ron a hacer aquella declaración en la mañana se habían esfumado.

- para los hombres es simple olvidar ¿verdad?- Hermione lo soltó en voz alta sin querer y noto que todos la miraban y que ron se encogía de hombros intentando esconderse.



La cena tuvo un ambiente tenso, Ginny no dejaba de mirar a Harry pero él no le dirigió ninguna mirada porque solo podía dedicar su tiempo a comer el chocolate que tenía entre sus dedos mirando a la chica de Ravenclaw. Ron por su parte miraba a Hermione con las cejas inclinadas hacia abajo en una mueca de enfado, ella en cambio solo podía mirar a la mesa de Slytherin donde la pareja reina de aquella casa se besaba acaloradamente mientras el resto de la casa les incentivaba a continuar con comida de por medio, Draco había aprendido el simple hechizo con facilidad y había tapado más de una espinilla aquella tarde.

- ¿Qué no pueden ir a follarte a otro lado? –susurro molesta pero lo hizo más alto de lo que esperaba y cuando noto una presencia detrás de ella se mordió el labio y volteo esperando que no la hubieran escuchado.
- ¿ follarr? ¿Qué es eso herrmione? –Víctor le sonrió y se sentó a su lado- esta tarde no pude entrregarrte algo importante

Hermione estaba sonrojada y no era por la presencia del búlgaro sino porque había dicho algo inapropiado frente a el ultimo chico que quería que lo escuchara, pero en notar que el sacaba una pequeña caja y se la daba a ella, se olvido de todo, algo tímida lo abrió y saco el chocolate con forma de corazón, le miro a los ojos, dudando de tomar una decisión pero en recordar la lengua de Draco metiéndose en los labios de la serpiente apretó el regalo intentando sonreír.

- Herrmione, te gustarria que fuerramos juntos a Hogsmeade – el colegio entero estaba en silencio y todas las miradas estaban puestas en ellos.
- c-claro

Miro el chocolate que tenía en los dedos sintiéndose algo triste porque en el fondo ella sabía que no era ese chico al que ella quería, pero si el rey de las serpientes estaba tan ocupado con su novia, no veía mal en solo salir con el búlgaro, después de todo solo era una cita nada más que eso. Levanto la mirada hacia el pero se encontró con su nariz, que estaba demasiado cerca para apartarlo, y así, con los ojos abiertos sintió los labios de él buscando un tierno beso, mientras todo el colegio estallaba en gritos y murmullos.

George que estaba en la mesa se levanto de golpe derramando su vaso de zumo de calabaza y salió corriendo, Hermione lo noto y se aparto de Víctor disculpándose intento seguirlo pero era demasiado tarde lo había perdido de vista, cabizbaja, no se sentía capaz de volver al gran comedor porque sabía que era el centro de las miradas decidió ir a caminar a la orilla del lago, no quería ver a nadie y era el único lugar que se le ocurrió.

Luego de unas horas de pasear el frio y la noche la obligaron a subir a su sala común, donde extrañamente todos los chicos estaban llenos de espinillas, y las chicas estaban tomándose el estomago para contener la risa, sin mucho éxito.

-¿Qué les ha pasado? Eso es por comer tanto chocolate –dijo lo último molesta al ver a ron lleno de ellas.
- no lo sabemos, es extraño que todos tengamos estas pestes –gruño Harry mientras miraba enfadado a Ginny que no se contenía la risa
- alguna chica abra querido reírse de ustedes –sonrió Hermione, cuando se acerco a mirar.
- ¿Qué demonios les ha pasado? –la voz de Neville se escucho en toda la sala, el único hombre que no tenía nada en la cara.
- ¿no has comido chocolates hoy Neville –Ginny se limpio una lagrima de la mejilla que había escapado de tanto reír.
- no, mi madre me enseño que solo tenía que aceptar el chocolate si es que yo sentía algo por la chica –sonrió tímido sonrojándose.
- de seguro nadie le ofreció es cosa de mirarlo –susurro ron recibiendo un codazo de parte de Harry.

Se llamo a la señora Pomfrey y habían usado una poción simple que había si puesta en los chocolates, al parecer alguna chica había querido burlar de los chicos superficiales que solo aceptaban los chocolates para ir por los pasillos solo haciendo gala de ellos.

-bueno ya no puedo hacer más por ustedes, en unos días el resto de las espinillas desaparecerán

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Draco estaba en el baño de su recamara mirándose al espejo cuando dejo escapar un suspiro, ya tenía más que asumido que le gustaba esa sangre sucia, el problema era que no podía dejar de ser quien era, mucho menos dejar que el resto supiera que sentía algo por ella, era demasiado humillante y vergonzoso que alguien llegar a saberlo. Por ello había tenido que fingir y dejar que Pansy le besara, aun a sabiendas de que podía hacerle daño a Granger.

Quito el hechizo de su espinilla y la miro dejando escapar una sonrisa, ella había quitado el hechizo para que Pansy hullera de él y lo había conseguido.

- eres tan astuta, maldita ojimiel, necesito sacarte de mi corazón

Volvió a sonreír y se alisto para ir a dormir, recordando el nombre de aquellas cosas horribles que salían en la cara, y recordando a la chica que por poco beso si no fuera por culpa de esa endemoniada espinilla.


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Muchas gracias a todas las que me leen y dejan comentarios ^^ gracias chicas, sobre todo a lena que siempre me deja algun comentario un beso gigante para ti


Y a bel que esta muy desanimada!! quiero que te animes ya tengo casi listo el de koda!! asi que anda, animate ^^ te quiero
Siguiente capítulo era mi primer rechazo pero se cambio titulo por tantantantanta “Sueños mojados” muhahahaha