Cap 2. Lengua de serpiente
El primer día luego de lo ocurrido Hermione se debido a esquivar a Pansy constantemente, los colores se le subían a la cara y corría si era necesario para no mirarla, pero en notar que la Slytherin la ignoraba comenzó a hacer su vida normal, una semana después había bajado la guardia.
La biblioteca estaba vacía, las vacaciones se acercaban y ya nadie entraba para estudiar, la única que seguía haciéndolo como era habitual, era Hermione Granger, eso era perfecto para quien la estaba acechando en la última semana, la chica llegaba siempre a la misma hora, tomaba el mismo libro y se quedaba allí unas cuatro horas en las que no extrañarían su presencia.
Pansy entro en la biblioteca unos 20 minutos después de que lo hiciera la castaña, y comprobando que no había nadie espero a que ella dejara su mochila y fuera a la última estantería, entró luego de ella bloqueándole la única salida.
- Vaya, vaya, has vuelto a ser un ratón de biblioteca, pensé que después de lo que te enseñe estarías buscando alguna chica para divertirte, pero no me sorprende dudo porque que cambies –la miró de pies a cabeza mientras la castaña pegaba el pesado tomo contra su pecho intentando esconderse- mírate, esa falda larga que cubre más de la rodilla y esa medias hasta un poco más abajo, ¿a quién vas a calentar con eso?
- No tengo la intención de hacerlo – soltó en un susurro temblando mientras miraba detrás de Pansy esperando ver a alguien pasar.
- Pues eso se ve desde Rumania –sonrió de medio lado notando el sonrojo que esto último causo en la chica y se acercó peligrosamente
- Por favor no te acerques –susurro quebrándosele la voz y Pansy lo volvió a sentir el sabor a chocolate en sus labios y se los relamió, ansiaba tener el control absoluto y eso sin duda lo sentía cuando la ojimiel era suya.
- ¿Qué tal si jugamos, Granger? –sonrió mientras se apoyaba en una de las estanterías y notaba que la chica asustada se apoyaba en la contraria- mira, si logras responder unas preguntas te dejaré ir, pero si no eres capaz de responder te quitarás una prenda por pregunta.
Hermione alzo una ceja mirándola, quería saber que era lo que se tramaba la chica pero era completamente imposible, su sonrisa de satisfacción daba a entender que las preguntas le serian imposibles de responder, pero eso era inverosímil, ella era Hermione Granger, prefecta de su casa, la mejor alumna de su generación y posiblemente de muchas más, así que asintió con la cabeza y miro a Pansy un poco más tranquila.
- Pero si yo respondo correcto y puedo salir de aquí con la mayoría de mi ropa puesta, no volverás a acercarte a mí y solo serán cinco preguntas- dijo tajante alzando el rostro con orgullo.
Pansy dejo escapar una sonrisa que erizó los pelos de Hermione, un mal presentimiento le inundó y toda la confianza en sus conocimientos la abandonó, tragó saliva y apretó más fuerte el agarre del libro, no podía ser, Pansy no podía ganarle en algo así, la única manera que se le ocurría era haciendo trampa pero era absurdo porque ella no era la que tenía que responder y no tenía su varita en la mano para confundirla o algo por el estilo.
- Está bien, comenzaré con una pregunta fácil –Hermione le miro desafiante, porque en el fondo se estaba burlando de ella al darle "preguntas fáciles" – eres tan ingenua. Granger, ¿Cuál es mi color favorito?
La ojimiel abrió la boca más de lo normal y le miro atónita, sin duda no era lo que se estaba esperando, había repasado mentalmente algunos hechizos mientras Pansy se tomaba el tiempo de preguntar, pero ahora frente a ella realmente no sabía que responder.
- Eso es trampa –dejó escapar cuando logró recobrarse.
- ¿Trampa? ¿Y eso por qué, Granger? Jamás me preguntaste de qué tipo de preguntas se trataba, al parecer estabas demasiado confiada de que sin importar cuál fuera sabrías responderla.
- Bueno entonces verde, tu color favorito es un verde sin importar la gama- Hermione dejó el libro mirando a Pansy, la verdad solo había dicho el color por Slytherin.
- Lo lamento, ese es el color de Draco, el mío es el azul, cariño –sonrió se acerco- así que quítate la capa.
Hermione iba a reclamar pero dignamente se quitó la capa dejándola caer, y miro a Pansy, estaba resignada a perder y extrañamente la idea de notar que su mirada estaba completamente en su cuerpo le gustaba, se estaba volviendo loca pero el juego tenía un toque divertido.
- Segunda pregunta: ¿qué odio para el desayuno? –se acercó a ella notando que esta estaba solo dedicada a intentar hacer memoria de si alguna vez miro la miró desayunando.
- ¿Tostadas con zumo de calabaza? –cada vez sus respuestas eran más inseguras y Pansy sonreía más, cuando estuvo lo suficientemente cerca comenzó a desabotonar la blusa de la Gryffindor.
- Lo siento, eres muy poco perceptiva, Granger – desabotonó notando que la chica no se resistía demasiado y empujando la prenda por los hombros esta termino en el suelo junto con la capa.
- Seguro y tú puedes saber que me gusta en el desayuno… -refunfuño enojada.
- Huevos revueltos de preferencia con zumo de naranja o manzana – Pansy no pudo ver la reacción de Hermione cuando esta adivino cada detalle de sus gustos porque se acerco al cuello de ella a morderlo.
- Pe-pero como sabes tú esas cosas – preguntó mientras ponía las manos en el vientre de la chica intentando apartarla, la verdad es que las sabia porque cuando notaba la mirada de Draco fija en la castaña ella también terminaba mirándola y sin querer había aprendido mucho de ella.
- Siguiente pregunta…. ¿Qué es lo que más me gusta de tener sexo? – se aparto un poco de la chica solo para notar el sonrojo de ella.
- Cómo voy a saber algo así… -se sonrojo aun más y estúpidamente intentó hacer memoria en lo que había vivido con ella- tener el control…
Pansy se apartó sonriendo y desabotonó su capa hasta dejarla caer y sin poder resistirlo más se lanzó a los besos chocolate que tanto la estaban llamando hace unos minutos. Lo que encontró fue una respuesta lenta y tímida pero aceptando la situación.
- ¿Cuál es el regalo de Draco que más me gusta? – sonriendo por saber que la chica no respondería pasó las manos hacia atrás buscando el botón de la falda y noto un jadeo de la castaña, seguramente por el recuerdo de lo ya vivido.
- Un anillo con alguna joya de seguro – susurró y notó como la falda terminaba de caer dejándola demasiado descubierta y desprotegida.- solo te queda una pregunta así que escoge bien tu prenda.
-Draco nunca me ha regalado nada en su vida - Pansy noto el toque de sensualidad en la voz de la chica y sonrió la alzo lentamente sentándola en la estantería, tocándole los muslos con deseo noto que la chica cerraba los ojos por el deseo.
- ¿Para qué te quiero, Granger? – notó que la chica le miraba enseguida con una ceja alzada sin entender por completo el propósito de esa pregunta pero decidida dejo escapar con sequedad.
- Solo sexo – parecía que de todas las preguntas era de la que estaba más segura y cuando noto que Pansy se apartaba un deje de tristeza se dejó ver en sus ojos.
- Eres muy astuta Granger… pero muy poco perceptiva –sonriendo tomó las bragas por los costados y tiró de ellas hasta quitarlas y apretando los muslos se acercó y volvió a morder los labios sabor a chocolate.
Hermione abrazó a Pansy con las piernas intentando cubrir su desnudez pero era imposible, los besos de ambas eran cada vez más apasionados y las manos expertas de la Slytherin estaban robando jadeos y gemidos de la castaña, que iban cada vez en aumento.
- Silencius totales –susurro entre jadeos Hermione dejando la varita en la estantería, la que rodo hasta el suelo, sin hacer ruido al caer.
Aunque a Pansy le excitaba escucharla sabía que si las pillaban así seria un castigo eterno, así que no se quejó y metió la mano en la entrepierna de la castaña buscando el botón que deseaba tocar, besándose ambas con deseo, Pansy comenzó a jugar con su lengua en la boca ajena recibiendo una tímida y pequeña lengua como respuesta, notaba que eso a Hermione le excitaba pues sus propios dedos se mojaban en la intimidad. Abrió los ojos lentamente y miro a la chica que estaba sonrojada y con la respiración acelerada entonces con una sonrisa amplia bajo por su cuerpo y recostándola un poco en la estantería besó el muslo por la parte interior notando que ella cerraba las piernas como podía, con sus manos Pansy se hizo espacio y comenzó a lamer y jugar con su lengua en aquella zona tan intimida y pura de la sabelotodo, sin poder escuchar sus jadeos notaba su placer en como ella se retorcía, cuando notó que la chica se contrajo completamente y un olor fuerte inundo su nariz se levanto sonriendo.
- Vaya, Granger – saco su propia varita y susurro- finite, creo que tendrás que estudiar más, no sabes cuándo puedes llegar a tener otro examen.
Diciendo esto se aparto de allí recogiendo su capa del suelo y saliendo rápidamente de la biblioteca con una amplia sonrisa, no podía haber nada más delicioso que sentir ese sabor, era mejor que cualquier chocolate refinado que ella hubiera probado en cualquier país.
A la mañana siguiente Hermione se dedico a mirar a Pansy sin poder evitarlo y aunque la otra no le dedicaba muchas miradas, cuando se sirvió su desayuno miro a la ojimiel con una sonrisa lasciva en los labios para luego morder tostada y beber su zumo de calabaza, leyendo sus labios susurrar un "ingenua" mientras volvía a sonreír.
•·.·´¯`·.· •·.·´¯`·.·•·.·´¯`·.·•·.·´¯`·.·•·.·´¯`·.·•·.·´¯`·.·•·.·´¯`·.·•·.·´¯`·.·•·.·´¯`·.·•
.
.
.
.
Después de aquello Hermione ya se había rendido, y en ocasiones era ella quien buscaba la mirada de Pansy, quien se volvió a adicta a los labios de la castaña, quien a pesar de ser novata se soltó con rapidez en los labios de la otra. Cuando Hermione recordada las cosas que había hecho se sonrojaba y no se reconocía prometiéndose no volver a hacerlo, pero luego cuando la chica le besaba volvía a caer rendida a esa lengua que la calentaba como nunca pensó y por el tiempo que llevaban haciéndolo ya había perdido todo el pudor una con la otra. Hermione había notado además que Draco no dejaba de mirarla en ningún momento así que intentaba evitarlo, porque pensaba que el chico estaba sospechando, pero no sabía sus verdaderas intenciones.
Una noche Hermione se quedo hasta muy tarde estudiando en la biblioteca, aunque la verdad también miraba si la pelinegra aparecía por la puerta, cuando se dio cuenta de que era demasiado tarde comenzó a ordenar sus cosas, estaba en ello cuando un brazo masculino le empujo contra la estantería con tal fuerza que la chica se golpeó la espalda, cuando ella levantó la mirada vio a un chico rubio platinado, pero no alcanzó a decir nada porque el chico la alzó y la sentó en la estantería así como Pansy lo había hecho hace unos meses atrás.
- ¿Pero qué demonios estás haciendo, Malfoy? – le empujó por el pecho pero la fuerza de la chica era notoriamente menor.
Draco no se digno a responderle y en cambio atrapó uno de los pechos de ella con fuerza mientras con la otra mano le tomaba de la muñeca alzándosela, Hermione estaba anonadada, ¿qué demonios tenían los Slytherin contra ella? Pero se arrepintió de hablar pues un chico al que no conocía demasiado, de cabello negro y mirada distante se acerco y con indicaciones de Draco la sostuvo por los brazos imposibilitándola a hacer algo. Nunca pensó que los Slytherin fueran capaz de algo así, por muy malos que fueran, no se los imaginaba violando chicas. Cuando las fuertes manos de Draco se metieron bajo su ropa a pesar de que ella apretaba las piernas y le arrebataron las bragas, ella entro en pánico, una cosa era el juego sensual que tenia con Pansy y otra muy distinta era que la obligaran y peor aun, un chico… Cerró los ojos con fuerza empezando a llorar en notar que el Slytherin se estaba tocando sobre el pantalón.
- No, por favor te lo suplico, no lo hagas – susurró dentro de lo que podía pues el otro chico le cubrió la boca con una mano, notó las lagrimas correr, solo entonces recordó su varita que estaba en su capa, pero de nada le servía porque le tenían las manos sujetadas.
-Draco, Draco, Draco, sabía que eres desesperado, pero jamás llegué a pensar que terminarías así – Pansy estaba bastante lejos pero con su varita firmemente sujetada y apuntando a los chicos- Mírate…. Tú… ¿teniendo que obligar a alguien para que lo haga contigo? Me das lastima.
Hermione abrió los ojos y la miro pero ella no le devolvía la mirada, estaba concentrada en poner la punta de su varita en la nuca de Draco, quien se había paralizado y había soltado el agarre que tenia contra la castaña.
- Vete a meterte en tus asuntos, Parkinson- se apartó lentamente de Hermione y se volteó para mirar a la atacante.
- Resulta querido, que este es mi asunto, porque estas tocando lo que es mío- Pansy dejo escapar una sonrisa y movió su varita rápidamente al chico que sujetaba a Hermione y le dejó inconsciente enseguida pero descuidó a Draco quien saco su varita de su pantalón y apunto a su compañera de casa.
- Parece que te gustó mucho tener que cumplir mi reto de tirarte a esta sangre sucia –sonrió apuntándola y miro de reojo a Hermione que en ese momento estaba sacando su varita.
-¿Qué? …. ¿lo hiciste por un reto? – Hermione miro a Pansy enseguida quien no le miraba estaba apuntando a Draco.
- Luego te lo explico Hermione – por primera vez ella dijo su nombre y aunque a la castaña le hacía ilusión escucharlo de sus labios en esos momentos no era como ella quería.
- ¡Expelliarmus!- Draco salió volando contra una de las estanterías y Hermione tomo su bolso saliendo en la dirección contraria luego de haberlo atacado.
Pansy sabía que Hermione estaba molesta, y por como la conocía tenía que explicarle enseguida o terminaría sacando un millón de conclusiones, pero antes de ir tras ella recogió sus pequeñas y rosadas braguitas. Grito su nombre un par de veces hasta que ella se detuvo y se volteó dispuesta a insultarla pero al sentir los brazos de Pansy en un cálido abrazo la bloqueó, sentir sus manos calidad abrazándola y una de ellas acariciar su cabello con preocupación.
- Que miedo he pasado… pensé que había llegado tarde… vi a Draco salir susurrando cosas y le seguí porque tuve un mal presentimiento, que bueno que estás bien – Hermione la iba a apartar pero en escuchar aquellas cosas la abrazo con fuerza y se puso a llorar en su hombro, porque solo ahora podía dejar escapar libremente el miedo que había sentido.
- Tenía tanto miedo… de que lo hiciera –susurró dejando escapar sollozos y notó los labios de ella en su frente.
- Espero que ahora nunca más se acerque a ti, por cierto... – saco las braguitas y sonriendo se las mostró- con esto me quedo
- Pervertida, devuélvemelas –se sonrojo muchísimo pero dejo escapar una sonrisa entonces sintió los labios de la chica en los suyos y le correspondió lentamente, calmándose.- ¿Por qué Draco a dicho eso… del reto?
- ¿Recuerdas ese día?... El primero, es verdad lo hice por un reto y Draco nos estaba mirando…. pero… luego de besarte no he podido dejar de hacerlo –le tomo el mentón para que la mirara- y creo que me he vuelta adicta a tu sabor.
Hermione estaba algo enfadada pero después de todo Pansy la había salvado, la había consolado y además le estaba contando la verdad, así que solo se dejo besar. Luego caminaron juntas unos momentos, hasta separarse para ir cada una a su sala común, Hermione sonrió divertida y se volteó.
- Por cierto para ser tuya tendrías que preguntarme algo, Pansy –notó que la chica se volteaba y le miraba.
- No creo que sea necesario, Hermione…. Ya te hice mía y lo sabes.
Los colores de la ojimiel pasaron de un rosado a un rojo fuerte rápidamente y corrió escaleras arriba escuchando la risa de la otra en los pasillos, mientras una se dibujaba en su cara.
Fin
1 comentarios:
`me ha fascinado, que lastima que no tenga mas capitulos, podrias publicarlo en fanfiction.net
eres genial!!!!
Publicar un comentario